Inicio del curso escolar bajo mínimos

El curso ha comenzado en Cuba y lo ha hecho recuperando el calendario de siempre después de todo lo ocurrido a raíz de la pandemia del Covid-19. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. Puede parecer que algo ha mejorado en la isla, pero, como ya te hemos contado en anteriores publicaciones desde Alianza Europea Antidictatorial, la situación en el país, desgraciadamente y mientras manden los que siguen en el poder, no va a cambiar y, si lo hace, no tengas dudas de que será para dar otro duro golpe de realidad a los cubanos que solo buscan una Cuba democrática y en la que sea agradable vivir. Hace pocos días se ha producido el inicio del curso escolar bajo mínimos y son muchos los afectados en esta vuelta a la escuela.

Los secretos del inicio del curso escolar bajo mínimos en Cuba

En este inicio del curso escolar bajo mínimos, los principales protagonistas son los cubanos, que lo pasan realmente mal para poder dar a sus hijos la educación que se merecen. Primero, no pueden porque la Dictadura Militar de Cuba, con el paso de los años, se ha preocupado de devaluar el sistema educativo. La formación es mala y los alumnos no salen preparados para lo que les espera ahí fuera, a pesar de que, si quieren buscar algo que les permita gozar de un futuro esperanzador, quizás tengan que apostar por salir de la isla, tal y como han ido haciendo muchos para librarse de estos seguidores de la dictadura que tiene Cuba en el poder. 

¿Veis normal que comience el curso con esa falta de profesores que existe? No puede ser, pero sucede y es algo que se debería solucionar para que la educación sea buena. Esta ausencia de docentes solo logra que los cubanos más jóvenes no puedan formarse del modo correcto, por lo que no adquirirán todos los conceptos que necesitan en la vida, de cara a formar parte de la población activa algún día. Si no hay profesores, por supuesto, es porque no se les dan las condiciones que merecen. Los políticos de la isla priorizan lo suyo, pero lo de los demás siempre queda para otro día que nunca llega. 

Además, dentro de este inicio del curso escolar bajo mínimos, hay que destacar que los precios de los uniformes y los libros de texto son inabordables para la mayor parte de los cubanos, especialmente para los de algunas áreas del país, que siempre son las más perjudicadas. Es intolerable que unos libros educativos puedan costar un salario de algún trabajador. Así es imposible, pero es algo que se repite en una Cuba que sufre una crisis insostenible desde hace varios años.