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Aroni Yanko García Valdés, enfermero cubano, natural de Villa Clara y padre de tres niños, lleva más de 4 meses en prisión acusado de “desacato agravado” a la figura de Díaz-Canel.
Por Arturo De Armas Lago, 15 Ago. 2024 – 8:05 CEST
El Tribunal Municipal de Santa Clara someterá a Juicio el próximo lunes 19 de agosto esgrimiendo “desacato agravado” en contra del enfermero Aroni Yanko García Valdés, detenido el pasado 3 de abril cuando se presentó en la unidad de la policía para cumplir con una citación previa.
García Valdés se presentó en la 3era Unidad de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), de la capital de la provincia, desde donde luego fue trasladado a la Unidad de Delitos contra la Seguridad del Estado y posteriormente enviado -bajo la medida cautelar de prisión provisional- a la cárcel “La Pendiente” de esa localidad.
Yunisley Suárez Rodríguez, la esposa de Arony Yanko se ha puesto en contacto con el Movimiento Acciones por la Democracia (AxD) para denunciar al injusticia que se está cometiendo contra su esposo y cabeza de familia.
“Mi esposo lleva más de cuatro meses en la prisión “La Pendiente”. Cuando por última fui al Bufete para saber acerca de su proceso y la abogada me comunicó que -justo en ese momento- había llegado un correo donde dice que le van a hacer finalmente el juicio el 19 de agosto” relató Yunisley Suárez Rodríguez vía WhatsApp a la dirección de AxD.
“Lo acusan de desacato agravado porque puso un simple meme en Facebook con la cara de Díaz-Canel, el dictador de aquí de Cuba”, pero también se aferran a eso para golpearme duramente dado que yo también me he declarado abiertamente opositora al régimen en varias ocasiones”, agregó.
Además la villaclareña nos pide amplificar la noticia y darle la mayor visibilidad posible a este caso dado incluso, que ahora mismo, está siendo fuertemente asediada por miembros de la Seguridad del Estado y de la Policía Política a medida que se acerca la fecha del juicio.
Aclaró también que: “No me dejan salir de casa y tan parece que nos quieran matar de hambre a nuestros tres hijos y a mí; mi esposo era el sostén de la familia y ahora me encuentro sola con los pequeños sin tener posibilidad siquiera de traer comida a la mesa; al régimen le importa poco la situación de mis tres menores de edad”.
Siguiendo la política de acoso y derivo contra todo aquel ciudadano que se atreve a enfrentarse al desgobierno, el fiscal pide para García Valdés la condena más alta prevista para ese delito: ¡ Tres años de privación de libertad !
El desacato se aplica en la isla –según la ley impuesta por la dictadura castrista- al que, de forma verbal o escrita o a través de un medio de comunicación, amenace, difame, insulte u ofenda a un funcionario público o autoridad y se agrava si el hecho se realiza respecto al Presidente, Vicepresidente del país, al Presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular y miembros del Consejo de Estado o del Consejo de Ministros, entre otros.
Faltando menos de 96 horas para que se inicie la vista oral resulta inconcebible que la abogada Yordania Figueroa, no ha podido entregar aún la Petición Fiscal, ni a la familia, ni a su defendido.
Por otra parte, Suárez Rodríguez, nos recuerda que ella también fue detenida junto a su esposo durante más de cinco horas en la unidad policial de Santa Clara, donde fue seriamente advertida por la policía política de que también podrían obrar en su contra y ser procesada penalmente, lo que supone una amenaza/chantaje para forzar su silencio y poner en juego –como han hecho otras tantas veces- la custodia, o la patria potestad de los niños de padres opositores.
“Yo estoy siendo amenazada de que no puedo publicar, no puedo denunciar su situación. Él es el sostén de mi casa. Estoy sola con mis tres niños y estoy siendo amenazada, incluso, de que me pueden quitar los niños, que me pueden sancionar”, lamentó.
Y para terminar subrayó que: “La gente de la Seguridad del Estado tiene una represión horrible aquí en Santa Clara, ¡hasta con la abogada; no se escapa nadie”
García Valdés es padre de tres hijos, y al momento de su detención laboraba en el policlínico “Capitán Roberto Fleites”, mejor conocido como “Malezas” entre los santaclareños.